Juzgar el desempeño de una persona funcionaria de manera ofensiva.
Interrumpir o restringir el contacto de una persona con otras, privándola de redes de apoyo social en el empleo, resultando ser aislada, apartada, excluida, rechazada, ignorada o menospreciada en sus funciones, ya sea que provenga por orden de una jefatura o por iniciativa de compañeros o compañeras de trabajo.
El uso de nombres ofensivos, estigmatizantes o discriminatorios para inducir el rechazo o condena de la persona.
Usar lenguaje despectivo o insultante para menospreciar o degradar a alguien.
Hacer comentarios despectivos sobre la apariencia, inteligencia, habilidades, competencia profesional, situación socioeconómica o valor de una persona.
Obligar a una persona funcionaria a permanecer sin tareas que realizar; u obligar a realizar tareas que no tienen relación con su perfil profesional o que están por debajo de sus habilidades profesionales y de las funciones para las que fue contratado o contratada, con el objetivo de denigrarlo o menospreciar.
Expresar intenciones de dañar o intimidar a alguien verbalmente.
Enviar mensajes amenazantes, abusivos o despectivos por correo electrónico, medios de comunicación interna, redes sociales o mensajes de texto.
Hacer comentarios despreciativos referidos a cualquier característica personal, como género, etnia, origen social, vestimenta o características corporales, ya sea en presencia de la persona o frente a otros u otras.
En general, cualquier agresión u hostigamiento que tenga como resultado el menoscabo, maltrato o humillación, o que amenace o afecte negativamente la situación laboral.
Gritar, avasallar o insultar a la persona funcionaria cuando está sola o en presencia de otras.
Asignar objetivos, proyectos o tareas con plazos que se saben inalcanzables o imposibles de cumplir en ese tiempo.
Retener información crucial para su trabajo o manipularla para inducir a error en su desempeño laboral o profesional y acusarle después de negligencia o faltas profesionales o funcionarias.
Difamar a la persona funcionaria, extendiendo rumores maliciosos o calumniosos que menoscaban su reputación, imagen o profesionalidad.